Hay que valorar la labor de los profesores

Nuestros hijos, habitualmente, pasan muchas horas en el colegio, y allí son los profesores quienes se encargan de su educación. Muchos piensan que esto no es así, que los profes sólo se encargan de explicarles a los niños la lección o revisarles los deberes, pero realmente están llevando a cabo una labor educativa más amplia, ¿Quién sino les dice como deben permanecer en silencio o bien sentados?¿Quien les inculca valores de compañerismo, amistad y solidaridad y muchas otras cosas más?

Su dedicación es mucha y suele estar infravalorada. Los padres suelen hablar muy a menudo de lo bien que viven los profesores: su cómodo horario, sus larguísimas vacaciones....pero se habla poco de la gran responsabilidad de su trabajo, de las horas que emplean fuera de su horario lectivo para preparar las clases, para buscar el material, para corregir ejercicios y exámenes..la enseñanza es un trabajo duro que no acaba nunca.

Los profesores suelen ser personas con gran vocación, personas comprometidas y dedicadas por entero a la labor de formar y enriquecer a sus alumnos. Para ellos es muy gratificante lo mucho que aprenden los niños o el cariño que reciben de cada uno de ellos...Son personas, que a lo largo de los años, ponen su corazón y su esfuerzo en beneficio de sus alumnos.

Muchos de ellos,en ocasiones, no dudan en aventurarse de viaje con sus alumnos, en acompañarles en la experiencia de convivir con sus amigos unos cuantos días; y eso, todos los que somos padres debemos entender que tiene su mérito...Si a nosotros, nuestros hijos (estamos hablando de uno o dos niños en la mayoría de los casos) nos sacan de nuestras casillas varias veces al día, es fácil ver lo duro que debe ser intentar controlar a 75 niños de 10 años en su (casi siempre) primera experiencia fuera del nido.

Sí..lo habéis adivinado, nuestros niños han vuelto del campamento sanos y salvos..pero lo importante al fin de cuentas es que se lo han pasado genial, que no paran de contar todas las experiencias divertidas que les han sucedido, que se han divertido con sus amigos y profesores, pero que también han aprendido a ser más autónomos , a desenvolverse ellos solos sabiendo que la sombra de mamá o papá no estaba cerca...
Los niños y niñas han tenido su mérito, no se lo voy a negar,pero el profesorado que les acompañaba han realizado un gran esfuerzo y es necesario reconocer su dedicación.

No sólo han mantenido informados a los padres en todo momento, sino que han estado al lado de los niños compartiendo su día a día, aguantando noches movidas, escuhando y solucionando problemas cotidianos, en definitiva, haciendo que nuestros hijos hayan pasado un viaje inolvidable..viaje que no entra en el horario lectivo, y que nuestros nenes han podido hacer gracias a la dedicación de nuestros queridos profes, ya que han hipotecado cuatro días de sus vidas en ejercer de padres y madres a tiempo completo..

¡¡Chapeau por todos ellos!!
La labor que han hecho ha sido digna de elogio, de nuestro agradecimiento.
En este país en el que vivimos,los padres suelen dirigirse a  las a.m.p.a.s, los profesores y los equipos directivos para quejarse. Pocas veces va alguien, sin ningún motivo aparente a decir "enhorabuena por su trabajo"...
¿Por qué si estamos contentos, no les hacemos llegar nuestras felicitaciones y agradecimiento a los profesores? Ser agradecidos es la mejor manera de enseñar a nuestros  hijos a serlo. Unas simples palabras, una sonrisa, o un gesto amable expresarán nuestro aprecio y respeto hacia la tarea y la entrega de los profesores, porque a todo el mundo le gusta que se le reconozca un trabajo bien hecho.
De sobra sé, que ayer cuando llegaron los niños, todos los padres tuvieron palabras de amabilidad y cariño hacia nuestros profes. Palabras, que aunque eran merecidas, nunca podrán expresar la felicidad de los niños y nuestros agradecimiento...Por ello, y para que quede constancia y no se nos olvide nunca, sólo puedo decir...

¡¡Thank you very much teachers!!

¡¡Con vosotros...al fin del mundo!!